Gustavo Cuello, la familia del colectivero de Ersa asegura que lo mataron

29 / 04 / 2021 | abril16-30-21
Gustavo Cuello, la familia del colectivero de Ersa asegura que lo mataron

La familia del colectivero de Ersa asegura que lo mataron

La muerte del chofer de Ersa, Gustavo Cuello, sigue sin ser aclarada (Pedro Castillo/La Voz).

?Al fiscal, a la Policía y al Gobierno le pedimos que investiguen como corresponde. Me parece que no se están haciendo bien las cosas. A esta altura, algún indicio, algo deberían tener?.

Ricardo Hugo Cuello asegura que aún no logra ?aterrizar? de la pesadilla que él y su familia están viviendo desde la noche del jueves 8 de este mes, cuando su hijo Gustavo Cuello fue encontrado muerto, con evidentes signos de violencia, en un sector oscuro de Villa Boedo, al este de la ciudad de Córdoba.

Desde entonces, el fiscal Tomás Casas tiene el expediente detenido en la calificación de ?muerte de etiología dudosa?: ni homicidio ni suicido, las dos hipótesis extremas que dividen a la investigación.

?Todavía no aterrizo, no entiendo, no lo acepto. No sé qué nos ha pasado. Hace ya casi 20 días y no tenemos ninguna respuesta?, vuelve a criticar Ricardo.

En las últimas horas, el hombre fue a buscar al abogado penalista Carlos Nayi para constituirse como querellante. En medio del dolor, la familia tomó la decisión de comenzar a seguir bien de cerca los pasos de la investigación, ya que entienden que la voluntad oficial es cerrar pronto el expediente como un supuesto suicidio, teoría de la que ellos descreen.

Por eso, para este martes a las 17.30 han convocado a una marcha de silencio que recorrerá desde el Patio Olmos hasta la plaza España, con velas y un único pedido para que el caso sea esclarecido.

La familia también se está apoyando, en este momento, en otro chofer de Ersa, Juan Basualdo, presidente de la asociación Los Padres del Dolor.

?Yo veo cosas raras. No cierra por ningún lado lo del suicidio. A mí no me saca nadie de la cabeza que fue un robo. El celular no aparece. Para mí fueron más de dos lo que lo atacaron esa noche?, plantea Ricardo.

Y continúa: ?Mi hijo andaba todo el día con las pilas puestas, vivía para su trabajo, para su familia, para el gimnasio. Estaba por abrir un almacén con la mujer y ya tenía programado un locro familiar para inaugurarlo. Él era el capitán del equipo de nuestra familia, estaba lleno de vida y ya le había dicho a la señora de organizar un viaje sorpresa a Santa Fe para visitar a su hijo Pablo que juega allá al fútbol?.

La noche en que murió, minutos antes de que fuera encontrado su cuerpo ya sin vida, el colectivero había estado chateando con su mujer y su padre, ya que les pasó la dirección web para seguir un partido de fútbol de Pablo en Las Parejas. En ningún momento envió señales de despedidas u otras que hicieran pensar en una autodeterminación.

Según la causa, todos los archivos del celular fueron borrados. El aparato nunca apareció hasta ahora

Aquel jueves, Cuello estaba terminando su recorrido al volante del ómnibus de la la línea 73 de Ersa. Su cadáver fue hallado sobre una calle colectora en Villa Boedo, mientras que el rodado fue hallado a unos 50 metros del cuerpo, chocado contra un árbol de un descampado, aún con el motor en marcha y el cambio puesto.

El colectivo que manejaba Gustavo Cuello terminó contra un árbol, en un descampado.

De acuerdo al expediente, el colectivero sufrió cortes profundos en las muñecas, ?compatibles con una autoagresión?, y también otra herida cortante en la mano derecha que no es, en un principio, compatible con una autoagresión. Pero los peritos determinaron que murió a causa del aplastamiento de cráneo que sufrió. En el informe, se hace referencia que el colectivero fue pasado por encima por un vehículo cuyas ruedas tendrían un grosor de unos 80 centímetros. La referencia es compatible con el eje dual trasero de los colectivos, según apuntaron las fuentes consultadas.

Para Cuello padre, a su hijo lo atropelló otro vehículo. ?Al no tener nada en la investigación, ni una pista, no me cabe otra idea de que la quieren hacer fácil y decir que fue un suicidio?, cuestiona.

En la causa que lleva adelante el fiscal Casas se sostiene que la cámara de un domo registró esa noche al colectivo frenado durante unos 10 minutos a unos 200 metros de donde finalmente fue encontrado. No se aprecia en esa filmación nada más que eso. Luego, cuando el rodado reinicia su marcha, queda fuera del foco, por lo que hay un ?punto ciego? que los pesquisas intentan dilucidar.

Ya declararon tres testigos (niños que jugaban al fútbol) que aseguran haber visto al vehículo con las luces apagadas y con las dos puertas abiertas. Según dijeron que observaron, en esa parte del trayecto Cuello iba solo.

También testificó una antigua novia de Cuello, quien dijo que hace ya más de dos décadas, cuando se pelearon, él le dijo que se iba a quitar la vida. Ahora, el padre del colectivero le resta valor a ese relato: ?Eso pasó hace mucho y mi hijo no hizo nada. Sólo fue un comentario tonto del momento. No entiendo cómo hoy puede importar eso?.

Sobre la denuncia por supuesto abuso sexual que el chofer había recibido por parte de un familiar, quien lo señalaba por presuntos tocamientos a una niña de su entorno, Ricardo dijo que Gustavo, si bien fue citado por una fiscalía, nunca había sido imputado. Y agregó que esto ocurrió antes de la cuarentena y que ya no le afectaba en el ánimo.

La Voz del Interior 26-4-2001

Cuéntanos que estás necesitando