?Me dijo que no se lo dijera a nadie, que eso iba a quedar entre nosotros. Me dijo que nosotros íbamos a ser como novios. Me apagó el teléfono. Me dijo que tenía que irme acostumbrando a eso, que no le tenía que tener miedo, porque eso iba a pasar todos los días. Que me iba a revisar todos los días. Me decía que íbamos a dormir abrazados la siesta?.
El relato pertenece a una chica de 13 años quien, según la Justicia de Río Segundo, sufrió abusos sexuales al igual que su hermana de 17 supuestamente a manos de un subcomisario de la Policía de la Provincia Córdoba. 
El oficial Julio Ángel Sánchez (48) se encuentra preso e imputado como supuesto autor de abuso sexual gravemente ultrajante reiterado y agravado por su condición de efectivo policial. 
Los abusos sexuales habrían ocurrido en mayo de este año tanto en la comisaría de Villa del Rosario, localidad del departamento Río Segundo, como también en el domicilio particular de las víctimas. Según la causa, el comisario las habría manoseado mientras les decía que todo formaba parte de una ?terapia? para ?quitar la violencia? del cuerpo.
En las últimas horas, un juez de Control ratificó la causa investigada por la fiscal de Río Segundo, Patricia Baulies, y decidió enviar a juicio al subcomisario Sánchez, quien permanece con prisión preventiva en la Cárcel de Bouwer. 
El efectivo niega los hechos y se abstuvo de declarar.
Sánchez, a su vez, espera ser juzgado por otra supuesta violación contra una jovencita, episodio que habría ocurrido años atrás en la ciudad de Córdoba. 

?Masajes curatorios?

Según la investigación, todo se inició en mayo pasado, cuando un vecino de Villa del Rosario se presentó en la comisaría del pueblo para pedir ayuda debido a que en su domicilio existían discusiones. Fue entonces que, según el expediente, el subcomisario se habría comprometido a interceder para ayudar a la familia, ya que él supuestamente conocía cómo curar la violencia familiar.
A los pocos días, supuestamente a pedido del jefe policial, la esposa del vecino fue a la comisaría con su hija mayor, de 17 años
Siempre según la causa, tras hablar con la madre, el jefe policial habría hecho pasar a la jovencita, tras lo cual habría cerrado la puerta de la oficina.
La adolescente denunciaría luego que el efectivo la manoseó mientras le decía que todo era parte de una terapia de sanación. 
Según la adolescente, el uniformado le habría dicho: ?Yo te voy a ayudar. Tenés que confiar en mí, podemos ser amigos, sólo si vos me dejás. Yo sé que este tipo de problemas se acumulan en las partes del cuerpo de la mujer, más que todo en los pechos, la panza y el medio de las piernas?.
Al día siguiente, siempre según la causa, el subcomisario fue a la casa de la familia y pasó a la habitación matrimonial para ?hacer la terapia? con la nena de 13 años, tras lo cual cerró la puerta. El padre no estaba en la casa.
La chica declararía luego, en la Cámara Gesell, que el uniformado la acostó en la cama, la hizo desnudar y la manoseó, mientras le decía supuestamente que no dijera nada a nadie y que esa terapia se iba a repetir otros días. 
?Lo peor es que, a pesar de tener un juicio pendiente, seguía en funciones?, dijo el abogado Carlos Nayi, representante de la familia.

Un oficial con un juicio pendiente por violación

El subcomisario preso y acusado de haber abusado de las dos hermanitas de Villa del Rosario tiene que enfrentar, a su vez, otro juicio oral por un supuesto ataque contra una joven. El hecho habría ocurrido en un domicilio en Córdoba.

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?La Voz del Interior 9-11-16

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