Te juro que si tuviera la escopeta, los cago de un escopetazo... Que no se la lleven de arriba...?. 
Esa es una de las frases que se escucha decir a uno de los policías que, aquella noche de septiembre último y a bordo de un patrullero, perseguían desde muy corta distancia a dos jóvenes y los hacían correr abrazados por una desolada calle del barrio San Roque, de la ciudad de Córdoba. 
Tal fue la impunidad de esos uniformados que filmaron el ?baile? contra los dos chicos y comenzaron a difundirlo por WhatsApp. 
El violento episodio se hizo público y llegó a la Justicia gracias a que una mujer policía, asqueada por lo que estaba viendo y por cómo se reían otros camaradas, decidió acudir ante un abogado.
En las últimas horas, el oficial sospechado de haber sido el jefe de esa patrulla y de haber llevado a cabo el ?baile? fue imputado por privación ilegítima de la libertad calificada precisamente por su condición de policía, por orden de la fiscal Jorgelina Gutiez.
La medida alcanza al oficial subinspector Guillermo Sebastián Torres, quien ya se encuentra detenido en la cárcel de Bouwer.
Se espera que la misma medida recaiga sobre quien lo acompañaba como chofer del móvil.

¿Por qué Torres estaba preso? 

Es que este oficial, a su vez, está sospechado de haber sido el policía que, en enero pasado, mató de un balazo en la cabeza a Santino Cabanilla, un niño de 1 año, quien había quedado en medio de un confuso operativo policial ocurrido en una villa próxima a barrio Marqués Anexo de Córdoba.
Por el crimen de ese niño, Torres se encuentra imputado como supuesto autor de homicidio agravado por uso de arma de fuego y por su condición de policía, por orden del fiscal Carlos Matheu. 
Si bien el crimen ocurrió en enero, el policía fue detenido recién en septiembre luego de que la investigación terminara acorralándolo contra las cuerdas.

Video de abuso e impunidad
En octubre último, se conoció un video en el que se veía a dos policías que, a bordo de un móvil, perseguían a dos jóvenes y los hacían correr abrazados por varias cuadras en una calle desierta.
En el video se ve cómo les tocan bocina y amagan con atropellarlos, mientras los hacen correr como parte de un ?escarmiento?. En un tramo, se escucha un disparo al aire (sería con una pistola) y luego uno de los policías se lamenta por no llevar consigo una escopeta para dispararles.
En las últimas horas, la fiscal Gutiez determinó que el ?baile? a los dos chicos de 13 y 14 años habría ocurrido el 8 de septiembre pasado en horas de la noche. Tras ubicar a los chicos ?quienes declararon que volvían a sus casas luego de haber estado jugando a la Play Station en otro domicilio?, la fiscal logró ir armando el rompecabezas del episodio.
Según la causa, el oficial Torres es quien supuestamente iba a cargo de esa patrulla policial y sería quien dirige el presunto amedrentamiento contra los menores. 
Por su parte, el Tribunal de Conducta Policial sancionó con situación pasiva al suboficial Waldo Miranda Encinas, quien sería quien manejaba la patrulla.

Silencio oficial

?Estamos muy conformes de que la fiscal haya imputado a ese policía por privación ilegítima de la libertad. Es un hecho muy grave?, expresó el abogado Carlos Nayi, quien llevó el video a la Justicia luego de que llegara a sus manos de parte de una policía.
?Falta que se impute al compañero de Torres por lo que pasó?, añadió el profesional.
Nayi, por su parte, es el abogado querellante que representa a los padres de Santino. ?Ese pobre niño fue ultimado de una forma brutal por ese policía?, indicó. 
Otro caso. Semanas atrás, una policía fue imputada por privación ilegítima de la libertad y amenazas, luego de que sorprendiera al novio de su hija de 14 años bajo la cama de la vivienda. El jovencito terminó golpeado por el esposo de la mujer. Sucedió en barrio Alberdi de Córdoba.

La Voz del Interior 17-11-16